martes, 6 de noviembre de 2012

Valle de la Ultzama


El atardecer también es un buen momento para ir más allá y subir a los embalses de Leurtza. Un paraje escondido entre tupidos bosques y montañas. Un lugar especial donde encontrar una paz sin igual. Con suerte podrás disfrutar de la visión de alguna rapaz, de garzas o patos salvajes que buscan esa tranquilidad en un enclave natural. Hay dos embalses, el inferior y el superior, separados ambos por una presa.

Se puede subir desde Urrotz o desde una pista que se toma a la derecha kilómetros después de pasar un curioso pueblo llamado "Ola", en Ultzama, al otro lado de las montañas. Es un bonito, aunque largo paseo, desde ese lado.